viernes, 7 de octubre de 2011

Lluvia



Extraña melancolía invade las esquinas.
La lluvia se complica en reticencias
quitándole protagonismo al espacio.
La ciudad inicialmente
se convierte en un desierto
de efigies impermeables.

Pero una gota agita lucidez
y destruye arenas tradicionales.
Se funde con otras en coro torrencial.
Insiste con su fuerza hermanada.
Se pierde generosa en cada rastro para sumarse
a otras y volver a perderse.

Tu alma licua las deudas de los hombres
Y tu cuerpo aliviana y acuna.

domingo, 2 de octubre de 2011

LABRANZA DE CONSERVACIÓN


Labrarme (en un mundo de piedra)
y no oír tu voz que me dispersa.
¿Si te corrieras y dejaras que el silencio trabaje?
Queda tiempo para salvar este suelo,
no hay espacio para un cisma.
Acá tiene que ser.
Dejame ver si zurciendo recuerdos
logro un paisaje acotado pero limpio.
Permitime intentar que la memoria no me falle esta vez
y siembre las semillas
que quedaron de los años florecidos.
La mala hierba estará siempre amenazante,
es importante cortarla al ras
ni bien asome su ponzoña.
Crecerán los lirios prometidos
(es bíblico, creeme)
y con ellos el renacimiento.

Entre estas formas se dirime lo esencial.
Quiero aprender y enseñártelo,
pero no encuentro el modo.